Excursiones desde Geiranger. Geiranger. Noruega

Julio 2011

Lógicamente en un lugar tan impresionante, grandioso y amplio como el fiordo de Geiranger, uno se puede quedar varios días, que lugares por ver, o excursiones por realizar, no va a quedar, las posibilidades son infinitas, y dependerán de las ganas y gustos de cada uno.
Montañas, cascadas, valles, granjas junto a los acantilados, recorridos en barco por el fiordo, paseos por el embarcadero del pueblo, miradores en lo alto de carreteras construidas en terrenos imposibles, y multitud y multitud de senderos.
En el camping donde nos quedamos en Geiranger, a orillas del fiordo, casi todo el mundo había venido a pescar, Ana probó fortuna con un anzuelo viejo que encontramos, pero nada, así que realizamos un sencillo paseo hasta la reserva natural Hyskje (foto 1) por un sendero que comenzaba en el mismo camping, y que no era más que bordear el fiordo por su orilla hasta llegar bajo una de las grandes cascadas que caen sobre el desde los acantilados. Atravesamos pequeñas casitas de leñadores (foto 2), y sobre todo disfrutamos de otras vistas desde diferentes perspectivas del fiordo, esta vez no desde la altura, sino desde la orilla, un paseo agradable, solitario y espectacular (fotos 3 a 6).
Pero solo hay que mirar un mapa de la zona para inventarse recorridos, en nuestro caso al ir con niños, pues sencillos, como subir hasta algunas de las lagunas de alta montaña, pero accesibles en auto, para  hacer un pic-nic (fotos 7 a 9).
O perderse por cualquier valle vecino, buscando pueblecitos típicos, paisajes (foto 10), cascadas larguísimas (foto 11), o riachuelos de montaña (foto 12).
Incluso podemos esquiar, ya que por aquí cerca hay una estación de skí de verano, que aprovecha las nieves eternas de un glaciar, y se encuentra arriba del pueblo de Stryn, y aunque nosotros no esquiamos, pues si disfrutamos y pisamos un rato la nieve...