Dalsnibba Mirador. Geiranger. Noruega

Julio 2011

Para obtener la panorámica más espectacular, espléndida y grandiosa del fiordo de Geiranger, y todo su valle, hay que subir hasta el Mirador de Dalsnibba, a unos 1500 metros de altitud sobre el nivel de las aguas del fiordo.
Como nosotros llegamos a Geiranger por otra carretera, todas las vistas que obtenemos desde aquí son nuevas y diferentes (foto 1), esta vez desde detrás del pueblecito de Geiranger, desde donde parte la estrecha carretera y comienza a serpentear mientras asciende por la montaña (foto 2). Conforme se asciende, hay diferentes miradores para apreciar el fiordo desde diferentes alturas (foto 3), pero en ninguno de ellos es que haya un suficiente espacio para aparcar, por lo que hay que intentar no molestar demasiado a los coches que circular, y tener paciencia, cuando somos nosotros los que no podemos avanzar, porque alguién se paró a tomar fotografías.
Conforme vamos tomando altura, la temperatura va refrescando, y nos acercamos a la línea de nieve (foto 4), vamos pasando por las casitas de los pastores en un paisaje idílico (foto 5), y si miramos para abajo vemos la sinuosa carretera en forma de serpiente que estamos ascendiendo (foto 6).
Llegamos hasta las nubes, y el fiordo se ve ya realmente pequeñito en la lejanía (foto 7). Nos comienza a llover, pero el paisaje se mantiene espectacular (foto 8), ya a una altura superior a lo de los glaciares que tenemos a la espalda (foto 9).
Y llegamos a lo más alto, hace frío y llueve, pero aun así las nubes altas no nos impiden disfrutar de las vistas en ninguna dirección (fotos 10 a 15), muy, muy espectacular...