Federico II el Grande
gobernó en 1740, y lo hizo desde Postdam,
amante de las artes y de las letras, embelleció la
ciudad con monumentos, pero sobre todo con palacios como
el de Sanssouci y el Palacio Nuevo. Estos se pueden
visitar normalmente, pero una vez al año en verano en el
marco de una gran fiesta se pueden visitar en la noche,
y os aseguro que todo cambia: las luces el ambiente todo
es diferente.
Con la tarde la gente va llegando al parque donde se
encuentran los palacios, y muchos lo hacen vestidos de
la época (fotos 1 a 4). Hay música y bailes por todos
lados (foto 5). Por supuesto se pueden ir visitando los
museos y galerías (foto 6), pero es al llegar la noche
cuando todo cambia, y la gente no debe marcharse como de
costumbre, ya que hoy permanecerá todo abierto e
iluminado: castillos, fuentes, esculturas (fotos 7 a 14)
y lo mejor visitar los interiores de los palacios con
luz nocturna, algo que no suele ser normal, y hace que
todo cambie de aspecto (fotos 15 a 17).
La música sigue por todos los rincones desde pequeños
conciertos clásicos en cada esquina de un cualquier
jardín, artistas moviéndose por el parque, y grandes
artistas en escena como el fin de fiesta en el que entre
otros actuaban los Cuatro jóvenes tenores (foto 18), y
terminando con un espectacular castillo de fuegos
artificiales (foto 19)...