No hay ciudad que se precie en Alemania que no monte su Mercado
Navideño, es lo más típico, y de visita inexcusable estemos en el lugar que
estemos, nosotros acabamos de llegar a Ulm en plena fiebre de introducción del Euro, y
estamos deseosos de ver y gastar los pequeños paquetitos de muestra que ya se pueden
adquirir en estos últimos días del año.
Sin duda hemos acertado, estos mercados son el mejor sitio para gastar los nuevos Euros en
tonterías, detallitos navideños y adornos, además como hace un frío que pela y no para
de nevar, es una buena excusa para recuperar fuerzas probando el famosísimo vino caliente
con un buen pedazo de salchicha.