Amanece un nuevo y ventoso día como siempre. Hoy decidimos alquilar una bicis e
irnos a recorrer el sur de la isla de Sylt. Salimos desde Rantum siguiendo la
carretera y ayudados por el potente viento en cola que llevamos, ya veremos como
volvemos (foto 1). Nuestra primera parada es el "garito" de moda de la isla. Se
llama Sansibar. Nos habían hablado de el, y lo encontramos de casualidad a
nuestro paso. Se trata de un restaurante de lo más pijo en la playa donde sirven
desayunos con champán y fresas con nata. Nosotros nos comemos discretamente
nuestro pic-nic en la zona de juegos para los niños, que está impresionante con
multitud de juegos, pelotas y cochecitos (fotos 2 y 3). Allí mismo está la
playa, y como siempre nadie en ella, muchas olas, viento y frío (foto 4), sólo
los pájaros parecen disfrutar (foto 5), bueno Ana se moja algo los pies, pero
sin quitarse la chaqueta de lluvia (foto 6).
Cuando nos cansamos de playa, continuamos en dirección sur hasta llegar a
Hörnum, la población más al sur de Sylt (foto 7), muy bonita y tranquila con su
típico faro (foto 8). También cuenta con una gran playa, esta para variar está
bastante protegida del viento, lo que permite al menos tomar el sol (fotos 9 y
10), pero las chaquetas siguen puestas.
Nos encontramos lo más al sur que se puede llegar aquí, por eso el último bareto
de la playa tiene un curioso y viajero nombre "Sudkap", me imagino que una
"meca" viajera para la clase pudiente alemana...
Para regresar a casa, viento en cara. Pues no es difícil, los autobuses de Sylt
tienen en la parte posterior unos artilugios donde colocar las bicis, así que
sin esfuerzo ninguno...
