Castellammare del Golfo, era el puerto de la antigua ciudad de Segesta, desde
donde los Elimos comerciaban y llevaban su mercancía al extranjero. Los primeros
datos que se tienen del actual puerto datan del 827 d.C. cuando este se vuelve
árabe junto con la ciudad de Segesta, y estos le cambiaron el nombre
bautizándola "Al Madarig" (Los peldaños), seguramente por lo escarpado de las
montañas que lo rodean. Más tarde en manos de los normandos la llamaron "Castello
a mare", ya que estos lo fortificaron y sus restos nos han llegado hasta
nuestros días.
Hoy se llama Castellammare del Golfo por encontrarse en el golfo del mismo
nombre y su belleza natural entre montañas no ha cambiado nada (fotos 1 a 5).
El castillo y parte de sus murallas, sobre todo las que dan al mar están
perfectamente conservadas, así como parte de sus callejuelas y escalinatas
(fotos 6 a 9).
También hoy conserva su importancia como puerto comercial y de pescadores,
aunque por la belleza natural de sus montañas, costas y playas ya es más una
atracción turística, y es muy agradable pasear por el puerto y recorrer su casco
antigua visitando también sus viejas iglesias como la de María S.S. del Rosario
que es de los siglos XI al XIII (fotos 10 a 12)...