En lo alto del Parque Nacional Hohe Tauern a 2315 metros
de altura (foto 1), y solo accesible por medio de telecabinas (foto 2),
se encuentra un confortable hotel-refugio de tres estrellas llamado
Rudolfhütte (fotos 3 y 4). Es un lugar estupendo para pasar una semana
alejado de todo, aquí solo encontrareis naturaleza, nieve y glaciares
con unos paisajes superespectaculares ya desde la ventana de vuestra
habitación (fotos 5 y 6), pero igualmente desde el comedor donde
desayunaremos con esas vistas, ya que todo está acristalado (foto 7).
Poco importa que al estar en lo alto de la montaña por la noche caiga
una tormenta de nieve (foto 8), no necesitamos salir ni ir a ningún
sitio ya que dentro tenemos todas las comodidades que se nos puedan
ocurrir: por supuesto un cálido fuego (foto 9), piscina (foto 10), salón
bar (foto 11), buffet (foto 12), rocódromo (foto 13), animación para
niños (foto 14), salas de juegos para grandes y pequeños (foto 15),
internet, etc, etc.
Hay varios hoteles de este tipo en los Alpes austriacos, pero este tiene
una particularidad que lo hace perfecto para familias con niños, y es
que estos no pagan nada hasta los 12 años, ni comida, ni estancia, ni
forfait, nada de nada y eso se nota si tienes dos peques...