Apenas a 6 kilómetros de Melnik, se encuentra el Monasterio de Rojen en la
región del macizo del Pirín (foto 1),y desde donde se aprecia el paisaje erosionado de
Melnik.
Fue fundado por un gobernador déspota de Melnik entre los siglos XII y XIII, aunque lo que
hoy puede contemplarse pertenece a la remodelación efectuada en el siglo XVI.
Pequeño, encantador y tal vez el más tranquilo que hemos visitado, se respira paz por
todos lados, desde la entrada (foto 2),hasta el interior (foto 3).
Una vez dentro se pueden visitar todas sus estancias, la
iglesia, capilla, iconostasio, cocina, claustro, refectorio, etc.(fotos 4 y 5).