Newgrange, es el sepulcro de
galería más importante de Europa, según la leyenda celta, aquí fueron enterrados
los legendarios reyes de Tara, sin embargo Newgrange es muy anterior a ellos. El
túmulo se construyó hacia el año 3200 a.C. esto lo hace 500 años más antiguo que
las pirámides de Egipto, y 1000 más que Stonehenge pero apenas en los años 60
comenzaron la excavaciones arqueológicas, en las que en seguida se descubrió que
durante el solsticio de invierno (21 de Diciembre), los rayos del sol entraban
en la tumba e iluminaban la cámara mortuoria recorriendo 19 metros de pasillo,
lo que convertía a este lugar en el observatorio solar más antiguo del mundo.
Los que diseñaron la tumba de Newgrange, poseían unas técnicas y dotes
artísticas increibles: Técnica porque en épocas que no se conocía ni la rueda ni
el metal, transportaron más de 200.000 toneladas de losas para construir la
cámara funeraria y el muro exterior, y lo artístico por la decoración geométrica
de sus piedras a base de espirales y motivos tipo zig-zag, siendo las
piedras más decoradas las situadas a la entrada de la cámara.
Para visitar Newgrange, se tiene que ir primero al centro de visitantes, donde
se ve una pequeña exposición de la vida en aquellas épocas (fotos 1 a 3) y luego
ya te llevan en grupos reducidos al túmulo (fotos 4 a 11) con el fin de que todo
el mundo pueda disfrutar en su interior lo que se observaría el día del
solsticio pero con una dispositivo luminoso artificial que crea el efecto del
sol penetrando en la cámara. Es de lo más espectacular. Visitarlo el día del
solsticio es cuestión de suerte, ya que se debe acceder a la página web del este
lugar, y registrarse para participar en una lotería en la que 15 afortunados de
cualquier parte del mundo podrán disfrutar del espectáculo siempre que ese día
no esté nublado.
Desgraciadamente no dejan hacer fotos en el interior, así que para que os hagáis
una idea del interior, la (foto 12), es de un póster del Centro de Visitantes...