Muchos muchos eventos culturales para la celebración de los 20
años de la caída del Muro de Berlín, y de todo tipo. Algunos
pintorescos como el hacer circular en las líneas de autobuses
los autobuses restaurados de aquella época, y es que los
berlineses recuerdan que fue tal la avalancha de gente que
cruzaba de un lado a otro de la ciudad cuando cayó el muro, que
tuvieron que venir autobuses de refuerzo de todo el país, por
que la ciudad de Berlín no daba a basto con su transporte
público (fotos 1 y 2).
Eventos musicales. Y no vino cualquier grupo, no: Jon Bon Jovi,
U2, Robbie Williams, por ejemplo llenaron las calles de gente
que disfrutó de su música (foto 3). También música clásica,
fuegos artificiales, etc...
Pero el evento principal, el que vieron hasta 100.000 de
personas a pesar del frío en directo (fotos 4, 5 6 y 7), y
millones de teleespectadores de todo el mundo por televisión
(foto 8), fue un dominó gigante de 1000 piezas de 2,5 metros de
altura y que estaba dispuesto durante 1,5 kilómetros por donde
pasaba el viejo emplazamiento del muro alrededor de la Puerta de
Brandenburgo. Esté dominó fue derribado en presencia de
personalidades de todo el mundo venidas para ver esta repetición
simbólica del día que hace 20 años conmocionó al mundo. Estaban
todos: Gordon Brown, primer ministro británico, Nicolás Sarkozy,
presidente francés, Dimitry Medvedev, presidente ruso, Hillary
Clinton en representación del Presidente Obama, etc.
Y también los personajes políticos en el poder en aquella época
estaban presentes: Mijail Gorbachov ex-presidente ruso, quien en
1989 decidió no reprimir las protestas, permitiendo así que
además otros países satélites de la URSS recuperaran su
libertad. George Bush (padre) presidente de los USA entonces
quien dijo que "Ningún muro es lo suficientemente fuerte para
ahogar el espíritu humano", Helmut Kohl, el ex-presidente
alemán, y los encargados de derribar el muro simbólico Lech
Walesa, quien encabezó las protestas en Polonia al frente del
sindicato Solidaridad junto con el ex-dirigente húngaro Miklos
Nemeth quien dejó que los alemanes orientales cruzaran la
frontera austro-húngara, desatando un éxodo que estimuló las
manifestaciones contra el régimen.
Habló la actual cancillera alemana Merkel, quien alabó el coraje
de los alemanes orientales que atrapados detrás de una barrera
de cemento de 3,6 metros de altura corrieron a los puestos de
control para forzar su apertura la noche del 9 de Noviembre de
1989.
Oficialmente entre 1961 y 1989, 136 personas murieron tratando
de cruzar el Muro de Berlín, aunque otras muchas consiguieron
cruzar los campos minados, perros y guardias armados que lo
custodiaban usando ingeniosos planes: túneles, cables aéreos,
compartimientos ocultos en vehículos, etc...