Murano. Venecia. Italia

Febrero 2012

La laguna que rodea Venecia, está sembrada de islas, algunas famosas, otras olvidadas. Casi todas actualmente pobladas, en el pasado estaban ocupadas únicamente por monasterios o sanatorios para enfermedades infecciosas donde aislar a los enfermos psiquiátricos o con malaria o tuberculosis.
La isla de Murano es la más famosa de todas, al haber dado su nombre a un tipo de vidrio que figura entre los más admirados del mundo.
Llegar a Murano desde Venecia en Vaporetto no tiene ninguna dificultad (foto 1), y una vez allí pasear por sus canales (fotos 2 y 3), ver sus palacios (foto 5), o sus iglesias (foto 6), es un agradable paseo.
Lógicamente lo primero que busca el turista al llegar allí es una fábrica donde ver elaborar el cristal en directo, y eso tampoco es ningún problema, ya que los talleres de los vidrieros bordean todos los canales de Murano, y en la mayoría se puede ver a los artistas trabajando el cristal (fotos 6 a 9).
El cristal es la principal fuente de ingresos de Murano, así que la isla está llena de tiendecitas para que los turistas compren sus pequeños regalos de cristal (foto 10). Hay de todo desde bisutería a lámparas (foto 11). Tiendas exclusivas de artistas renombrados (foto 12), donde comprar piezas únicas como esculturas, un precioso caballo (foto 13), o figuras muy elaboradas (foto 14).
Pero el arte del cristal en Murano no solo está en las tiendas, se encuentra también en las calles y los artistas locales se promocionan haciendo grandes obras de arte para exponer en calles y plazas que decoran la isla (fotos 15 a 17). También hay muchos particulares que decoran las entradas de sus casas o ventanas con adornos de cristal, otros incluso tienen todo su jardín de cristal (foto 18)...