Mariánské Lázne, también conocida con el nombre alemán de
Marienbad, es la más hermosa estación balnearia de la Bohemia Checa.
Relativamente moderna, comenzó a desarrollarse en el siglo XIX, pasando de ser
un aislado bosque a un delicioso conjunto de parques, edificios y pabellones,
que enseguida se pusieron de moda entre la nobleza y personajes conocidos. Por
ejemplo Wagner compuso en Marienbad "Lohengrin", o el rey Eduardo VII y el
emperador Francisco José de Austria, incluso el escritor alemán Goethe eran
asiduos visitantes.
En el centro de la población, está la principal estación balnearia , el edificio
de la Kolonada (fotos 1 y 2), donde se encuentran los manantiales
principales, y donde se puede probar sus aguas medicinales.
Hay varios manantiales, y cada uno posee su propia composición de aguas (foto
3), por lo que no es de extrañar, que un médico prescriban dosis con cantidades
exactas de agua de varios manantiales, para llegar a la receta que cada persona
necesita para aliviar su dolencia, y uno simplemente va y toma un poquito de
cada una (fotos 4 y 5). Esta "Kolonada" o columnata principal, es de hierro
forjado y pareciera un invernadero (foto 6), y tanto fuera como dentro se puede
tomar cafés, las típicas obleas de la región (foto 7), o un helado (foto 8). Hay
más columnatas secundarias en el mismo parque central donde hay otros
manantiales (foto 9).
Otra de las atracciones de este parque del centro, es su "fuente cantarina"
(Zpívajici fontana), cuyos chorros de agua y espuma se coordinan con
composiciones musicales, lo que congrega numeroso público. El programa musical
parece que varía mucho, y el día que nosotros fuimos había desde Chopin pasando
por Strauss, hasta Morricone o Andrea Bochelli (fotos 10 y 11).
La calle principal, que recorre todo el parque, es la Hlavni, y es una sucesión
de ostentosas casas, hoteles y cafés, que dan a el gran y hermoso parque central
de la estación balnearia (fotos 12 a 15), un auténtico lujo disfrutar de este
lugar...