El país de Malta, está compuesto por dos islas principales: Malta y Gozo,
separadas una de la otra por solo 8 kilómetros, y entre ellas se encuentra la
deshabitada Comino, aparte de otros varios pequeños islotes.
Malta hoy en día vive en parte del turismo, pero no es un turismo de playa, si
no un turismo cultural, que viene a visitar muchas atracciones históricas con
las que cuenta y os he explicado un poco, mucha gente joven viene a estudiar
inglés, supongo que porque el clima es más atractivo que el del Reino Unido,
pero la verdad es que los malteses tienen su propio idioma y no se parece en
nada al inglés (foto 1), y aunque todos hablan inglés, este para ellos no es su
idioma materno, si no uno aprendido en la escuela.
A pesar de ser el cuarto país del mundo en densidad de población (330.000
habitantes en una isla de 27 kilómetros por 14 de ancho en sus puntos más
alejados), es un país muy tranquilo, en el que el tiempo parece haberse
detenido, y la vida tiene mucho de rural, así que comprar la fruta en un camión
ambulante como se hacía antaño es habitual (foto 2), o bañar tu caballo en la
playa (foto 3).
Todo tiene su encanto como los típicos autobuses que recorren la isla (foto 4),
y que en su interior suelen ir llenos de imágenes religiosas.
El tópico que más se repite y más representado por doquier, hace referencia a su
pasado histórico, a la Orden de los Caballeros de Malta, y la cruz que la
representa está en todos sitios, lógicamente en su bandera, pero también por
poner un par de ejemplos en las botellas de vino (foto 5), o en sus Euros, ya
que Malta es miembro de la Unión Europea desde 2004. (foto 6)
Tiene su propia gastronomía, y en ella abundan los platos a base de rellenos:
calamares, berenjenas, pimientos, etc. Pescado fresco y un tanto desconocido
para el que no sea de estas latitudes. Pero el plato más típico, el que tenéis
que probar es el : "Fenek-Biz-Zalza", un estofado de conejo tradicional (foto
7), en el que se fríe primero este en una mezcla de vino y grasas, para a
continuación estofarlo lentamente con verduras, hierbas y más vino.
Malta es historia e historia por todos lados, así que palacios como el de
Verdala (foto 8), fortines como el de Ferretti (foto 9), o torres de vigilancia
como esta en la isla de Comino (foto 10) las encontraremos por doquier.
Muchas ciudades y poblaciones interesantes como por ejemplo Vittoriosa (foto
11), y muchas actividades o excursiones que se pueden realizar disfrutando de su
buen clima mediterráneo: parques, jardines, iglesias, zonas arqueológicas,
playas, museos, artesanía, arte, mercadillos, cruceros, deportes, etc, etc,
etc...
Moverse entre las tres islas principales no es problema y hay un buen servicio
de ferrys entre ellas, sin necesidad de reservaciones (foto 12)...