Hospital Kuks. Bohemia Oriental. Chequia

Mayo 2012

A unos 20 kilómetros al norte de Hradec Kralové, se encuentra un curioso y antiguo balneario barroco, que nada tiene que ver con los tan conocidos balnearios de la Bohemia Occidental. Se encuentra en el poblado de Kuks (foto 1) que de lejos parece una población como cualquiera, y así era hasta que un aristócrata de origen alemán: el conde Franz Anton von Spork (1662-1738) heredó estas tierras y una enorme fortuna. Sabiendo que los manantiales de su finca eran ricos en minerales proyectó la construcción de "su" balneario, que tardó más de 25 años en construir.
Al balneario no le faltaba de nada. Además de los baños, tenía hospital, teatro, palacio, hipódromo, jardines con sus laberintos, etc, etc. Inaugurado en 1724, de inmediato se convirtió en la estación de moda de la nobleza centro-europea, en la que había todo tipo de entretenimientos culturales: paseos por el río en barca, partidas de caza, conciertos a cargo de la propia orquesta del balneario, invitados famosos como el propio Johann Sebastian Bach que actuó aquí.
Pero todo se torció cuando Spork murió en 1738, y apenas 2 años después se desbordó el río Elba llevándose consigo todos los edificios que estaban junto a él, pero lo peor es que el propio manantial fue afectado por la riada, por lo que la estación balnearia perdió su razón de ser. Y todo fue abandonado.
Aun así lo que todavía se conserva es impresionante. si nos situamos en el río, y miramos al pueblo, hermosas escalinatas nos conducen a él (foto 2), y si miramos hacia el hospital, pareciera que está en funcionamiento (foto 3). Si bien ya no hay jardines, el paseo que conduce al hospital es muy agradable (fotos 4 y 5), y enseguida podemos contemplar la sucesión de 24 radiantes estatuas alegóricas (algunas copias, las originales se encuentran en el interior) de Matías Bernard Braun alineadas a lo largo de la terraza del hospital (fotos 6 a 12), representando los vicios a un lado, y las virtudes al otro.
Se puede pasar a ver el interior del hospital y lo que queda del palacio (fotos 13 a 16), e incluso tener una visita guiada (en inglés o Checo), para perderse por sus pasillos (foto 17), y estancias en la mayor parte ahora vacías o en ruinas, o contemplar su antiguamente famosa farmacia barroca que conserva su mobiliario original (foto 18)...