Entro a Moldavia, y me dirijo directamente a su capital: Chisinau. La primera
impresión como siempre en una ciudad soviética o ex-soviética son sus grandes
estructuras a la entrada de la población para colocar su nombre (foto 1). Pero
en seguida se dejan ver los grandes supermercados y centros comerciales (foto
2), contrastando con su antigua y tranquila estación de tren (foto 3). edificios
soviéticos (foto 4), mucho tráfico (foto 5), y más y más monumentos de cemento y
estatuas (foto 6).
Una vez en el centro y paseando a pie, vemos que la ciudad tiene muchos parques
y espacios verdes además de lagos. Las áreas verdes más grandes están junto a la
catedral, y el central parque Stefan cel Mare (foto 7), con una preciosa fontana
en su centro (fotos 8 y 9). Aunque los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial
hicieron desaparecer dos tercios del casco antiguo, aun quedan calles y
edificios antiguos, bueno de antes de la era estalinista (fotos 10 y 11). los
feos monumentos de héroes y guerreros son todas las épocas (foto 12).
Entre los monumentos que destacan en el centro, se encuentra un pequeño y
coqueto Arco de Triunfo (foto 13). aquí tengo que decir que todas las calles o
informaciones de los monumentos o edificios, están tanto en moldavo como en
ruso, para el ruso, claro hay que saber cirílico, pero para el moldavo, como es
muy parecido al rumano, o sea un idioma que viene del latín, pues es bastante
entendible (foto 14). también está la catedral ortodoxa (fotos 15 y 16), blanca
y reluciente con sus cúpulas en forma de cebolla. y al igual que en Transnistria
y en muchas ciudades de la antigua Ex-URSS mercadillos con todo tipo de objetos
a la venta (foto 17), pero destacando sobre todo los de tipo militar, desde
gorras a uniformes (foto 18)...