30 de Septiembre del 2003

Muchas muchas gracias a todos los que de una manera u otra con vuestras visitas, mails, postales virtuales y llamadas de teléfono nos habéis hecho sentir tan bien y tan felices, estamos contentos de teneros como amigos aun en la distancia, la verdad es que estamos muy emocionados, y eso es difícil explicarlo con palabras. Gracias de nuevo por vuestras felicitaciones y buenos deseos.
Tengo que deciros que Ana Sofía (que hoy cumple cinco días), es muy tranquila, el poco tiempo que está despierta sonríe, duerme prácticamente todo el día, incluso cuando come, así que nosotros dormimos bastante bien por la noche, y alguna que otra siesta por la tarde los tres juntos.
La mamá también se encuentra perfectamente, de hecho le dieron el alta el domingo, dos días después del parto.
También el tema del papeleo y burocracia en Bulgaria al que teníamos mucho miedo por el idioma, al ser todos de nacionalidades, normas y leyes diferentes, etc, también ya está todo solucionado, y Ana Sofía tiene su pequeña y bonita partida de nacimiento en búlgaro, paso previo para obtener las distintas nacionalidades y pasaportes.
Así que como todo ha sido más fácil y sencillo de lo que esperábamos al ser nuevos en esto de ser papás, para todos aquellos que pensabais que ahora os dejaría tranquilos con mis crónicas viajeras durante unos años, pues deciros que de momento, y mientras Ana Sofía no diga lo contrario, continuo:

Baños Szechenyi. Budapest. Hungría

Abril 2003

Budapest cuenta con más de un centenar de fuentes y baños termales, algunas datan de la época romana, y otras descubiertas por los turcos, así que hay que dedicar al menos medio día para hacer un baño completo en alguno de los más famosos, esto quiere decir piscina fría, baño termal caliente, seguido de masaje, sauna, etc, dicen que rejuvenece diez años, yo lo encuentro agotador...
Nosotros elegimos los Baños Szechenyi (foto 1), considerados como uno de los complejos termales más grandes de Europa, además de ser uno de los más bonitos e impresionantes con sus piscinas exteriores a 38°C entre edificios antiguos con columnas, estatuas, jardines, etc...(fotos 2 y 3)
Estas aguas ricas en calcio, sulfatos y magnesio, no solo son buenas para el reumatismo, cardiopatías y otras dolencias, sino que además parecen ser buenas para la mente a juzgar por la cantidad de gente que aquí se reúne durante todo el año para jugar al ajedrez...(foto 4)