Para que todo no sea ciudad, me salgo a dar una vuelta por las
afueras de Buenos Aires, apenas a 30 km se encuentra la localidad de Tigre, a
donde se llega fácilmente en tren, siendo esta la última parada del llamado tren
de la costa que te deja en el delta del Río Paraná. El delta está formado por
multitud de islas que se comunican mediante lanchas, siendo un verdadero
laberinto.
En la estación fluvial de Tigre, os informarán de los distintos paseos que se
pueden realizar con las lanchas colectivas de pasajeros (foto 1), desde un
pequeño paseo por el delta, hasta un viaje internacional a Montevideo.
El paseo en la lancha es muy tranquilo (foto 2), y se ven multitud de casas para
pasar el fin de semana, clubs campestres, así como elegantes casas antiguas, las
de más valor histórico, perfecta y excesivamente protegidas contra todos los
elementos (foto 3)Yo opté por un sencillo viaje hasta una parada llamada "Tres
Bocas" (foto 4), ya que en el folleto que me dieron lo marcaba como un
interesante lugar para realizar sencillos paseos a pié.
Pero no tuve mucha suerte, ya que la noche anterior había llovido mucho, y todo
estaba inundado (foto 5), y el agua de los canales totalmente turbia y fea (foto
6). En mi pequeño paseo no pude estar atento a toda la flora y fauna que
prometía el folleto, ya que el camino además de descuidado estaba totalmente
embarrado, las pasarelas que cruzan los canales en un estado precario (foto 7),
y los caminos sin ningún tipo de indicación, son comidos e invadidos por la
vegetación (foto 8)...